¿Comprar o arrendar un inmueble? Esa es la cuestión

Te damos la bienvenida al club de los que quieren empezar una nueva vida. Es hora de comenzar a planear la mudanza que tanto esperas y a coordinar todo lo que necesitas para tener tu propio espacio. Pero sabemos que una de las principales preguntas que tendrás es si es mejor comprar o arrendar un inmueble. ¡Y claro! Cada una de estas opciones implican cosas muy diferentes.

Pero, a pesar de que sea una decisión difícil, siempre podrás escoger la mejor opción si tienes total claridad de qué es lo que más se ajusta a tu estilo de vida. Por eso, queremos dejarte aquí algunas ventajas y desventajas de cada opción. La idea es que puedas decidir basándote en razones reales y justificadas para dar ese paso.

¿Estás listo? ¡Vamos a analizarlo muy bien para saber si para ti es mejor comprar o arrendar!

Primeras preguntas para decidir si comprar o arrendar

Antes de acercarte a tu tienda favorita de decoración y de tus muebles favoritos, primero deberás descubrir si tu estilo de vida y lo que más te gusta se relacionan con comprar o arrendar un inmueble.

Es fundamental que aprendas a diferenciar entre lo que quieres, lo que te fascina y lo que realmente necesitas. Saber la diferencia entre estas tres te permitirá tomar decisiones acertadas. Entonces, lo que quieres es eso que te gusta pero que podrías vivir sin él; lo que te fascina es eso que ni necesitas ni te hace falta pero que te llena de vida y lo que necesitas es lo que requieres para continuar con tus planes de vida.

Esto es importante porque para decidir si comprar o arrendar un inmueble deberás primero pensar en lo que necesitas, luego en lo que quieres y de último en lo que te fascina. De esta forma, podrás ir construyendo un espacio acorde con tu plan y no con tus impulsos.

Para ayudarte a tomar la mejor decisión, hemos querido dejarte aquí algunas preguntas que podrías hacerte antes de arrendar o comprar un inmueble en cualquier lugar del mundo. Ten en cuenta que estas preguntas son solo recomendaciones y que puedes ajustarlas, modificarlas y compartirlas según lo necesites:

¿Eres amante de la estabilidad financiera?

Si tu respuesta es “sí”, entonces comprar un inmueble, apartamento o casa, podría ser la mejor opción para ti. Ser dueño de una propiedad te dará la sensación de estabilidad y seguridad financiera pero implica un esfuerzo anual y a largo plazo que debes asumir.

¿Tienes alma de viajero?

Si lo que sueñas y lo que está entre tus planes es explorar nuevos lugares y te gustaría mudarte con facilidad; arrendar podría ser la opción perfecta para ti. Esto te dará la flexibilidad de mudarte sin problemas y sin tener que preocuparte por los costos de venta de una propiedad.

¿Te gusta hacer cambios en tu hogar?

¿Eres el señor o la señora “hazlo tu mismo”? Entonces tu opción es comprar. Si eres de los que aman hacer cambios constantes en tu hogar, comprar un apartamento puede ser una buena opción para ti. Te da la libertad de hacer cambios según tus gustos y preferencias.

¿Te preocupa el costo de vida en tu ciudad?

En muchas ciudades el costo de vida está actualmente por las nubes. Y es que el mundo cada vez es más cambiante y las ciudades que antes eran centros económicos, hoy carecen de lugares para tener un hogar. O los lugares que antes estaban rodeados de naturaleza, han terminado por estar llenos de condominios inaccesibles para muchos.

Por eso, comprar puede llegar a ser un reto aquí. Pero si buscas opciones más económicas, arrendar podría ser una buena opción para ti. Te permite ahorrar en los costos iniciales y tener más libertad financiera. O incluso, hacer parte de esos grandes condominios o centros económicos sin comprometerse totalmente con sus costos de vida.

Te puede interesar leer: Cómo elegir el barrio ideal para comprar vivienda.

¿Estás dispuesto a hacer una inversión a largo plazo?

O ¿Tienes la capacidad financiera para hacerlo? Es importante que no te comprometas con un inmueble si no estás dispuesto a pasar muchos años de tu vida con una deuda. Esto requiere de paciencia, constancia, trabajo seguro y de organización minuciosa.

Si tienes la capacidad financiera para hacer una inversión a largo plazo, comprar un apartamento podría ser una buena opción para ti. Puedes esperar una apreciación del valor a largo plazo y tener una propiedad que puedes vender en el futuro.

Ahora, estas preguntas son solo una parte de las reflexiones que podrías hacerte antes de comprar o arrendar un inmueble. Pueden existir muchos factores que de repente cambien tu posición, por ejemplo, una herencia, un trabajo fuera de tu ciudad o que tu familia crezca. Lo más importante para este caso es que tomes una decisión considerando tus finanzas no solo actuales si no las que tendrás a futuro.

"¡Los 30 nos respiran en la nuca Marce! No sé si arrendar o comprar un inmueble pero sí sé que puedo ahorrar en todos mis seguros antes de tomar una decisión."
Tweet

Flexibilidad al arrendar

Existen algunas ventajas en arrendar un inmueble. Por ejemplo, no tendrás que preocuparte por grandes mantenimientos técnicos del hogar pues de eso se encargará el arrendatario. Tampoco deberás preocuparte por mantenerte el resto de tu vida ligado a un solo espacio en el mundo porque podrás moverte libremente según las circunstancias de tu vida lo permitan.

Eso sí, arrendar te da la libertad de cambiar de ciudad, de estilo de vida y hasta de estilo de decoración cada vez que puedas, pero eso también implica una capacidad de desapego que deberás desarrollar para dejar ir tu hogar constantemente.

Arrendar un apartamento te da la flexibilidad de mudarte con facilidad y sin preocuparte por los problemas de mantenimiento. Además, no tienes que hacer un pago inicial considerable, lo que puede ser una gran ventaja si no tienes el dinero para hacerlo.

Sin embargo, arrendar también tiene sus desventajas. Los alquileres pueden aumentar con el tiempo, lo que puede afectar tu presupuesto a largo plazo. Además, no tienes la libertad de personalizar tu hogar según tus gustos y preferencias, y siempre estás sujeto a las reglas y restricciones del propietario.

O quizá… ¿Comprar?

Comprar un apartamento puede ser una excelente opción si buscas estabilidad financiera y una inversión a largo plazo. Ser dueño de una propiedad te dará seguridad y estabilidad financiera, empezarás a construir una vida y también podrás arrendarla en el futuro. Además, puede ser una buena inversión a largo plazo.

Sin embargo, comprar un apartamento también puede ser una inversión extensa y una gran responsabilidad financiera. Tendrás que hacer un pago inicial considerable, además de los gastos mensuales de hipoteca, impuestos y mantenimiento. Además, si decides vender la propiedad en el futuro, tendrás que pagar por los costos de venta y correr el riesgo de no obtener el precio deseado.

Ya es hora de salir de casa de mis padres. ¿Comprar o arrendar un inmueble? Esa es la cuestión. Por eso debo leer e informarme hasta saber si me quedo en el sofá o salgo a buscar apartamento ¡ya!
Tweet

Tip para ahorrar en la compra de tu inmueble

Si finalmente te decides por la compra y deseas hacerlo con un crédito hipotecario, también debes considerar una cosa: los seguros. Para acceder a un crédito hipotecario o leasing habitacional, las entidades financieras exigen una serie de seguros. Por lo general, estos seguros suelen ser una cuota mensual que puede ir vaciando tu bolsillo sin siquiera notarlo. Pero hay algunas formas de ahorrar en tus seguros para créditos hipotecarios, desde reducir las cuotas estratégicamente hasta escoger el que más se adecue a tus necesidades.

Y si, para eso estamos nosotros. Podemos ayudarte a escoger los mejores seguros para tus créditos hipotecarios y de esa forma empezar a ahorrar dinero para la cuota de tu crédito. Esto no es un trabajo fácil, por eso te sugerimos dejarlo en las manos expertas de Pérez Lara. Con nosotros tendrás una asesoría completamente gratuita en la que podremos ayudarte. ¡Escríbenos!

Por otro lado, esperamos que estos consejos sean útiles para ti y que puedas tomar una decisión informada sobre lo que quieres hacer en el futuro. Recuerda que para dar pasos grandes también se necesitan estudios grandes y dedicación diaria. ¡Buena suerte!